martes, 21 de diciembre de 2010

Colacion

Lo miro y no me ve, me mira y no lo veo, comenzó el jueguito. Nos atrevimos a mirarnos a la vez, una leve sonrisa fue la aprobación, luego un hola suavecito. A la hora de almuerzo nos tomamos el tiempo de quedar juntos al bajar las escaleras, preguntas idiotas -¿Cómo estás?, ¿Dónde vas a almorzar?, vivo cerca, voy a mi depto, ¡Bingo!- , nos fuimos para allá, solo me quedaba un poco de arroz, pero fue lo de menos, comimos el postre primero, pensé que todo quedaría ahí, pero no, ya van dos meses y no solo con postre nos divertimos.

miércoles, 15 de diciembre de 2010

VALPO AMOR

Caminar por la costanera siempre me a gustado, se escucha el mar y las gaviotas, gracias al viento algunas gotas saladas nos tocan. El sol brilla y me dices amor y besas mi nariz, me da risa tu ligereza, no te importa que todos nos vean, la gente pasa por mi lado y me dices amor y tocas mi cara, te ríes de felicidad, respiramos ese aire especial, mezcla helada y salada que nos alegra la mirada.
Caminamos por la orilla de la playa y nos besamos, mientras los dedos se rozan con el frío.
Más tarde fuimos a los cerros, yo subía cantando y tú susurrando te amo, te amo..., que risa los ojos brillan con el azúl del mar, amo tanto este lugar.
Siempre estamos jugando, esta vez me dices amor y muerdes mis labios, te voy a agarrar, pero la brisa de Valpo corre más.

viernes, 10 de diciembre de 2010

Tardes de cine

-¿Qué te gusta de mi?- me preguntó.
-¡Tus pestañas negras!- le respondí.
Se rió, no me creyó.
-¡Pero es verdad, me gustan tus pestañas, hacen qué tus ojos se vean profundos!- terminé de decirlo y lo encontré tan siutico.
-¡A mi me gustas todo!- me dijo y con sus ojitos me sonrió.
-¡Viste, viste, tus ojos me encantan..., bueno algo más jejejeje!-
Nos abrazamos, entrelazamos las piernas y seguimos viendo tele.

chanchitos

-¿Querí chocolate?- me preguntó, mientras me comía unas ricas galletas
- ¡Obvio!-, fue mi respuesta.
-¿Querí jugo?- le pregunté, mientras se comía los chocolates
-¡Mmm..., si..., dame, dame!-, me contestó.
-¿Querí papitas?- me preguntó, mientras tomaba jugo
-¡¿No será mucho?!-, le dije y nos reímos.
-¡Dame más chocolate!- Le dije, mientras se comía las papitas
-¿Queda jugo?- me pregunta, le sirvo un vaso llenito -¡Toma!-, le digo.
-¡Estoy panzón!- me dice
-¡Es qué comes como chancho!-, le digo y se cagó de la risa.
-¡Oye!- me dice.
-¿Qué?- le pregunto.
-¿Querí un beso?- me quedé pensando...
-¡Ya po'!- me reclama, me cagué de la risa, al final hicimos el amor con chocolate y jugo..., nice!!!

jueves, 9 de diciembre de 2010

una obra de teatro, una comedia, la verdad la idea original es una sitcom, pero tuve que escribir esta mientras, ta entrete, ya la mostraremos :)

MI MAMA TIENE NOVIO Y YO …?


Autor: Eduardo Quiroz Quezada













Departamento pequeño, bien decorado, un living, mesa de centro, salidas a la cocina por un lado, terraza al fondo, salida a dormitorios por un costado. Suena el teléfono, entra Diego, contesta y se sienta en el sofá.


Diego: ¡Aló! (escucha del otro lado una voz extraña), ¡Perdón…, no le entiendo, podría hablar más claro por favor (ahora le entiende), ¡¿Mamá?!, ¿pe…, pero qué te pasa, qué te escucho tan mal?..., ¡Qué!, ¿Te operaste?... ¡Una cirugía, qué te estiraste qué?...ah…una cirugía estética, un lifting?, eso?... vaya y cuándo?..., ¡Ayer!..., ya ok, ¿y desde cuándo operan en Valdivia?..., ¡Cómo!..., ¿Acá?..., ¡Ya… y cuándo llegaste a Santiago?..., ¡Ayer mismo!..., ¡ya… y cuándo te dan el alta?..., ¡Hoy!..., o sea te regresas hoy?..., no…, ¡Hable más claro, qué no se le entiendo…, linda usted se operó de la cara, no de la lengua!..., ya, ya, sorry, son las bandas, es que no se de cirugías, cómo yo no lo necesito…¡No mamá, no quise decir qué estas vieja (se ríe), oiga…¿Qué?..., no te puedo ir a buscar, es que…, es que tengo que hacer…, ¡¿Cómo, qué, qué tengo que hacer?!..., cosas mías, yo acá tengo vida social...¡Oiga no se ría!..., lo que pasa es que tengo una cita…, ¡Oiga, córtela con reírse!..., ¿Cómo qué no me cree?, le estoy diciendo que tengo una cita…, no pue’s, si te digo que no puedo…, ¿Cómo qué se viene pa’cá en taxi?...,¡No puede mamá, ya le dije qué voy a estar ocupado…, ya córtela con reírse…, ¿Cómo qué nadie me pesca?..., (se pone serio) ¿Qué sabe usted, hace tiempo que deje de ser el muchacho tímido…, además, este…, yo he cambiado un poco…, ¿Cómo qué ya llegó el taxi?..., ¡No, no mamá, oiga!, le digo qué tengo una cita, me van a venir a ver…, ¡No mamá, no soy mal hijo, pero si ya que se vino sola, por qué no se va a un hotel?, plata tiene, cómo tan apretá’?..., ¡Bueno, entonces algún asilo, perdón casa de reposo, hay unas regias, la van a atender como una reina…, ¡Pero claro, ve que tengo razón…¿Cómo qué igual se viene pa’cá?, oiga, pero mi cita…, ya no se ría…, se le van a soltar los corchetes y va a quedar más suelta aun (se ríe burlonamente)… ¡Oiga no corte, este…no venga mamá…(se queda en silencio). ¡Colgó…, puta se viene pa’cá!, esta señora no me respeta…, ¡Mi cita!, ¿Qué hago?


Se levanta, trata de ordenar un poco, está desesperado, luego se sienta resignado.


Diego: ¡Uf…, justo ahora!, ¿Qué he hecho yo, para merecer esto? (suena nuevamente el teléfono, lo contesta desanimado), Aló…, ¡Mamá, dime te arrepentiste y te vuelves a Valdivia!…, ¿Cómo?..., ok, anota, José Victorino Lastarria No 220, departamento 401 (con la voz cada vez más apagada), ¿En cuánto rato?..., media hora…, ya, ya…, la espero (cuelga el teléfono).



Queda muy inquieto, se levanta, tiene que ver cómo lo soluciona, su mamá ya viene en camino, se le ocurre una idea, se sienta, toma el teléfono y marca.






Diego: ¡Aló…, Carito te necesito, tengo una urgencia…, no, na’que ver, si no te estoy cobrando, relájate se que eres pobre (ríe), ya po’hablando en serio, lo que pasa es que mi mamá viene a la casa…, si y tú cachai que ella no sabe nada de lo mío…, no po’ ah…, si no…, ella no sabe, nunca se lo imaginaria…, oye no te rías…, cómo que se me nota la cazuela de pava…, ya, te necesito, vai’a ser mi polola o me pagas hoy mismo lo que me debes, ah…, se acabo la risita ajá…, no me interesa tu novio, ya arréglate pa’que te vengas cuanto antes…, lo que pasa es que te presento como mi novia y que por ti no tengo tiempo, para estar con ella, así se va luego (habla para si) espero…, en todo caso esta de lo más suelta, parece que anda en busca de novio si hasta una estirada se pegó en una clínica…, bueno de eso hablamos después, te vienes ahora por favor…, Carito, vístete bien regia, no…, si no insinúo que te vistas mal, pero es que tu gusto es un tanto folclórico…, ya, ya, no importa ven que estoy desesperado.


Corta la llamada, se queda pensando y de pronto se acuerda que viene un amigo a su departamento, así que lo llama para posponer la reunión, pero no logra comunicarse con él, decide mientras arreglar las cosas en la sala, saca fotos comprometedoras, en eso tocan a la puerta, se asusta, abre la puerta.


Diego: ¿Quién será? (abre la puerta)

Camilo: ¡Buenas tardes Diego!

Diego: ¡Bue…, buenos…

Camilo: (entra) Supongo, qué ya te imaginas el por qué estoy acá?

Diego: (extrañado) No…, la verdad no sé por qué esta acá don Camilo.

Camilo: ¡Los gastos comunes pues…, otra vez estas atrasado y sabes que eso a la administración nos complica, los pagos…

Diego: ¡Chu…, esta bien, disculpe, le hago el cheque ahora…

Camilo: ¡No, es fin de semana y ya que debes tres meses, debes pagar hoy y en efectivo!

Diego: ¡Eh…, es que no tengo efectivo en estos momentos!

Camilo: ¡Fácil, vas a un cajero y sacas la plata!

Diego: Esta bien, pero ahora no puedo, tengo visitas por llegar.

Camilo: (lo mira capciosamente) Ah, si!, otro de tus amiguitos, esos medio finitos…

Diego: ¡Oiga, no se pase!

Camilo: ¡Por favor, si son tan piola (se ríe), viene el Willy?

Diego: (extrañado) ¿Y cómo sabe su nombre, lo conoce?

Camilo: Bueno, amigos no somos, pero como llega dándole besos a todos, cada vez que viene.

Diego: Este…, lo que pasa es que él, es muy cariñoso y…, vivió mucho tiempo fuera del país…

Camilo: ¡Ah, sí? Y dónde así por ser?

Diego: ¡En…, en Bolivia!

Camilo: ¡Ya!, es que son muy cariñosos por esos lados…, pero no importa, no me interesa saber lo que hacen tus amigos, ahora necesito que pagues.

Diego: Esta bien, más rato paso por su departamento a dejarle la plata, esta bien?

Camilo: Eso espero (se retira)

Diego se queda solo, sigue arreglando, cuando vuelven a golpear la puerta.

Diego: ¿Qué querrá este caballero otra vez? (abre la puerta y entra rápidamente Willy)

Willy: ¡Diego, amigo estoy desesperado, estoy soltero nuevamente!

Diego: (inquieto) ¡Willy, ya encontrarás otro novio, siempre es así…

Willy: ¡Ahora no, tú sabes que este era mi verdadero amor, mi amor definitivo.

Diego: (lo imita en todo lo que dice) ¡Esto lo dices siempre, cuantos novios te he contado este año, ¿Ocho, diez?..., y estamos en Agosto, llevai’dos más, si es uno por mes (riéndose)

Willy: No seas cruel, ya tengo más de treinta, y no quiero quedarme solo, es por eso que busco y busco…

Diego: Ese es tu problema, siempre buscas el amor y el amor verdadero llega solo y más encima con el vestido de novia en la cartera.

Willy: Espera bonito, quizá me excedo en mi búsqueda, pero por lo menos tengo novio, mientras tú sigues solo y cada día más adulto mayor (le ve la cara de molestia)…, pero bueno ya no importa nada, para poder recuperarme de esta depresión, te invito a comprar.

Diego: ¿Comprar qué?

Willy: ¡Hay no sé, no te pongas latero, compramos algo…, bonito y que el vendedor sea más bonito, ponte tú!

Diego: Es que ahora no puedo salir, de hecho te llamé, para avisarte que dejáramos para otro día la junta, ya que tengo visitas.

Willy: ¡Ya po’, te ayudo a atenderlas!

Diego: ¡No…, es que me va a ayudar la Carito…

Willy: ¿Quién?

Diego: ¡La Carola!

Willy: ¡La Caro, pero si no tiene gusto…, mejor yo…, o es qué la prefieres a ella en vez
de a mi?

Diego: No se trata de eso…

Willy: ¿Entonces, por qué no yo?

Diego: Es que es muy delicado…

Willy: (indignado) ¡Si, soy delicado, pero no debieras discriminarme, qué mal amigo…

Diego: ¡Qué no, no te discrimino, salgo contigo a la calle y no me da vergüenza…

Willy: ¡Claro, ahora te avergüenzas, eres último, yo jamás me avergonzaría de ti!

Diego: ¿Y de qué te podrías avergonzar (Willy lo mira con burla, mientras se sienta en el sofá cruzando las piernas)…, ¡Bueno ya, no importa, mi mamá viene de visita!

Willy: (entusiasmado) ¡La tía!

Diego: (lo mira sorprendido) ¿No estas un tantito mayor, para llamar a mi mamá, tía!?

Willy: ¡Ves, ya me tratas de viejo…, pero no importa, arreglemos todo, para cuando llegue la tía…, se va a quedar unos días, para dejarle la pieza bien mona, ponte tú?

Diego: (desalentado) Si, parece que viene por unos días…, qué horror, qué hago?..., además hoy tengo una cita…ups!

Willy: ¡¿Una cita…, y quién es la victima?!

Diego: (arrepentido de lo dicho) ¡No…, quise decir que hoy tengo una reunión con la junta de vecinos del edificio, eso!..., así que es mejor que te vayas…

Willy: ¡Pero cómo!, necesitas mi ayuda, para recibir a la tía…

Diego: ¡Qué no, te digo (suena el timbre)…, oh, no… mi mamá!

Willy: ¡Huy qué emoción, yo abro! (corre a abrir la puerta)

Carola: ¡Hola (le besa ambas mejillas), Diego llegó tu mamá?

Diego: No, pero debe estar por llegar y ahora necesito que ordenemos todo acá y preparar nuestro pololeo.

Carola: De eso te quiero hablar, no creo que sea una buena idea la de hacernos pasar de pololos, además yo tengo novio y nos vemos todos los días, no sé que le voy a explicar hoy…

Willy: ¡Hay qué es esto de pololos! (hace gesto de asco)

Carola: Lo que pasa es que Diego, me pidió que me hiciera pasar por su polola, para engañar a su mamá…

Diego: ¡Engañar no, es solo darle a la pobre de mi madre una alegría, es que ella es tan inocente, tan pura…

Carola: ¡Hay ya, no seas cursi, lo que me preocupa es mi pololo.

Willy: ¡¿Y qué tanto bonita, acaso al mono de tu pololo no lo puedes dejar de ver un día, emancípate mujer!

Carola: Lo que pasa es que me quiere tanto.

Willy: ¡Si te quiere, pero te quiere puro…

Diego: ¡Ya, déjala no seas pesado, ahora Carito, vas y llamas a tu novio y le dices que hoy no se verán, es solo por hoy.

Carola: ¿Crees que resulte esta farsa?, a lo mejor tu mamá entiende lo tuyo o en una de esas ya lo sabe.

Diego: ¡Estas loca, mi madre es una mujer clásica, jamás lo entendería, mucho menos se imagina siquiera que yo, no soy el hijo que ella cree (lo dice dramáticamente)

Willy: ¡Seguro, la tía no te cacha pa’ná, con lo dramático que eres, de seguro te veía a ti en vez de la teleserie del 13.

Diego: ¡Ya basta, ahora tú, te vas (suena el timbre), ¡Mi mamá…

Willy: ¡Huy por fin, yo abro (abre la puerta y aparece una mujer alta, con algunas vendas en la cara) ¡Hola tía…(se impresiona),¡Ha…

Diego: ¿Mamita?

Sara: ¡¿Me reconociste Dieguito!?, pucha y eso que me quite como 15 años, según el doctor.

Diego: ¡Pero mamá, si no te conocí, es que calculé que eras tú, por, por… las vendas!

Willy: (extrañado) ¿Entonces, esta es la tía?

Diego: ¡Ya calla y entra la maleta. Pase mamita, qué rico tenerla en mi casa, pase, siéntese, le duele mucho, cuándo le sacaran las vendas, cuánto tiempo le queda…?

Sara: ¡Hay, tan dramático niño, si las vendas me las tengo que retirar yo, pero más tarde, si te dije que es una intervención ambulatoria, tan exagerado que has sido siempre, podrías haber sido actor, te habría ido bien fíjate…, pero se te ocurrió ser sicólogo, pobres pacientes, hum…, siempre pensé que ibas a ser artista, bailarín ponte tú?!

Willy: ¡Cierto tía, podría haber sido un bailarín, bueno es un tanto chiquito (se queda mirando a Sara), usted tiene un porte regio, maravilloso (se queda mirando a Diego), no se lo habrán cambiado en el hospital, digo yo?

Sara: ¡No mijito, es la herencia del petizo de su finado padre, los buenos genes no le llegaron al pobrecito…

Diego: ¡Mamá, no hable así!

Carola: ¿Quieren un café?

Diego: No…, mamá disculpa te presento a Carola, mi novia.

Sara: (sorprendida) ¡¿Novia…, estás seguro hijito, no debieras analizarte bien, no sé, es realmente lo qué quieres, te hace feliz esta situación?

Willy: Pienso lo mismo tía, debiera ir al sicólogo, hazte ver Diego, no estas bien…

Diego: ¡Oye paren, por qué dicen eso, yo soy muy feliz con mi novia (abraza a Carola)

Carola: (incomoda) ¡Si…, somos felices juntos!

Sara: (mira a Willy) Deberías hablar con tu amigo, se nota que tú, estas más claro, a todo esto cómo te llamas niñito?

Willy: Guillermo, pero me dicen Willy.

Sara: ¡Hay…, igual que mi peluquero!

Willy: ¡¿Si?!, yo, soy diseñador.

Sara: ¡Qué maravilla, necesito combinar unas ropitas, ya que tengo una cita esta tarde (ríe coqueta)

Willy: ¡Pero no faltaba más, vamos al tiro tía!

Sara: ¡Si vamos, mira que la hora pasa y debo estar regia…

Diego: (molesto) ¿Y se puede saber a quién le pediste permiso mamá?

Sara: (extrañada) ¿Permiso…, para qué?

Diego: (molesto y nervioso) ¡Para eso…, una cita, eres una señora, viuda, con un hijo…

Sara: ¡Hay no seas dramático, viste si debiste haber sido actor. Dieguito ya eres adulto y yo, soy viuda hace rato y ya es hora de divertirme…, bueno si nos disculpan (le habla a
Willy), vamos Willito, para arreglarme, mira que ya debe estar por llegar mi futuro ex novio (ríen los dos), Huy es graciosa esa broma, me la enseñó Willy mi peluquero (se van al dormitorio)

Diego: ¿Te das cuenta Carito, mi mamá es otra, la desconozco, me la cambiaron en la cirugía.

Carola: ¡Ya no seas dramático, tu mamá solo quiere vivir, pasarlo bien, además esta regia.

Diego: ¡Es qué no entiendes, mi mamá siempre fue una mujer recatada, sobria, clásica, no entiendo qué pasó?

Carola: Quizá siempre fue así y no podía porque estaba casada, pero ahora no, es una mujer libre, moderna, joven aun, tiene su plata, sin mayores responsabilidades y su hijo bueno pa’l drama ya está crecidito, como pa’incharla…

Diego: Es que es tan complicado, imagina ya tiene una cita!

Carola: Podrías aprender de ella, ponte tú!?

Diego: ¡Oye, yo ya tengo una cita!

Carola: (sorprendida) ¡Ah…, si, y cuándo Romeo?

Diego: ¡Hoy…, hoy, es hoy y mi mamá está aquí!

Carola: (preocupada) ¡Pero ella de seguro va a salir y si no, sales tú!

Diego: (sarcástico) Buena idea, imagínate qué pensaría mi pobre mamita, ella no cacha nada…

Carola: (ríe) Yo, creo que tu mamita las cacha todas…, incluso a ti.

Diego: ¡Imposible, a mi no se me nota…, o si?

Carola: Bueno, si eres piola, pero un soltero sobre los 40 y nunca a presentado una novia, o sea…! Ahora igual teni’detallitos (lo mira), sentadito ahí, con las piernas cruzadas mmm…, el cigarrito siempre con ese dedito cursi bien parado, ahora cuando caminas igual mueves mucho el poto.

Diego: ¡Oye, eso no es cierto (mueve el dedo en negación en forma amanerada, se quedan mirando, hasta que se percata y lo hace de manera brusca), esta bien, pero por eso mi mamita se imagina que yo…, que yo…

Carola: ¡Qué eres gay!, si no es pa’tanto, en Europa hasta se casan, si hay cantantes, actores (Diego hace el gesto de que son muchos), viste ahora que tú seai’gay, no le interesa a nadie, un sicólogo gay, uf…, esta lleno.

Diego: (incomodo) ¡Si no es pa’tanto!


Entran en escena Sara y Willy.

Sara: ¡Dieguito a qué no te imaginas!

Diego: No mamá, no me imagino.

Willy: ¡Es qué te mori’amigo…

Diego: ¿Qué pasa, no entiendo?

Sara: Llamé a mi cita, para juntarnos, ya que lo conozco solo por chat…

Diego: ¡Chat!, o sea qué nunca lo ha visto?

Sara: ¡Si por supuesto, por la webcam…

Diego: ¡Qué! (Carola se ríe)

Sara: Y obvio, nos hablamos mucho por teléfono, es tan encantador.

Diego: ¡Pe…, pero y si es un sicópata?

Willy: ¡Hay no seas dramático!

Sara: No ven, si debería haber sido actor, podrías probar en el teatro, con este chiquito buen mozo del Pato Torres, yo creo que te iría bien.

Carola: ¡Si, en una de esas hacen una obra con tu vida, ponte tú…

Diego: ¡Ya basta de burlas, y tu mamá no iras a ninguna cita, te lo prohíbo!

Sara: (se ríe profusamente, se contagian Carola y Willy, todos ríen y Diego los mira desconcertado)

Diego: jaja, qué les provoca tanta risa? (mira a Carola)

Carola: ¡Hay no sé, es que me tenté con la risa de tu mamá! (sigue riendo)

Willy: jaja, es que todo es tan divertido, la tía tan alta y tú, tan chico, ella tiene una cita y tú no…

Diego: (se molesta) ¡Te equivocas, yo, tengo una cita hoy! (se da cuenta que no debió decirlo)
Se callan las risas y lo quedan mirando.

Sara: ¿Una cita…, y con quién?

Willy: ¡Si con quién?

Diego: ¡Eh…, con Carito, si con Carito por supuesto, ella es mi novia!

Sara: (lo mira extrañada) Sigues con eso…, estás seguro mijito?

Diego: ¡No sé por qué me preguntas eso mami…, pero no cambiemos de tema, ya te dije que no iras a la cita con ese desconocido.

Sara: No hace falta que salga, resulta que lo llamé y adivina, vive en este edificio, qué chico es el mundo (ríe) y debe estar por llegar, lo invité a tomar un café.

Suena el timbre.

Willy: ¡Debe ser él, qué romántico…, yo abro la puerta (abre la puerta y todos quedan sorprendidos y dicen su nombre)

Todos: ¡¿Camilo?!

Sara: ¡Hay…, lo conocen?, qué bueno así podremos hablar con más confianza (se acerca a recibirlo)

Diego: (para si) ¡Ahora si que cagué!

Entra Camilo junto a Sara, se sientan en el sofá, Diego los mira atónito junto a los otros.

Willy: (le habla en secreto) ¡Oye, yo creía que este caballero era…(le hace gestos gays)

Diego: ¿De dónde sacas eso?

Willy: ¡Es que siempre, cuando vengo me saluda de beso!

Diego y Carola: (lo miran) ¡Eres tú, quién le da besos a todos en el edificio, cuando llegas!

Willy: ¡Crucifíquenme ahora, lo que pasa es que soy cariñoso, además viví bastante tiempo fuera de Chile…

Diego y Carola: ¡Si, en Bolivia!

Willy: ¡Hay bueno allá es súper normal darse besos…

Diego y Carola: ¡Si, claro…

Willy: ¡Bueno ya, ahora que la tía está con Camilo, sabes lo qué significa eso Dieguito?

Diego: (muy nervioso) ¡Si, lo sé, qué hacemos?

Willy: ¿Hacemos?, eso me suena a manada, debes preguntarte ¿Qué hago?

Diego: ¡Qué mal amigo, cómo puedes decir eso, tienen que ayudarme!

Carola: Bueno, vamos a la cocina a preparar unos café y pensamos qué hacer…

Salen Carola y Diego a la cocina, Willy se sienta a mirar a los tórtolas, entra Carola y lo saca del brazo.

Sara: ¡Qué coincidencia, que vivas justo en el mismo edificio que Dieguito!

Camilo: Si, es una maravillosa coincidencia querida. Eres la mamá de Diego y por lo visto ya conoces a sus amiguitos.

Sara: ¡Hay si, ese Willy es un encanto y Carola la polola de Dieguito…

Camilo: (extrañado) ¡¿Polola?!

Sara: ¡Si…, raro cierto?

Camilo: ¡Mucho…, y desde cuándo que son novios?

Sara: No lo sé, en fin…, cada loco con su tema, pero hablemos de nosotros, en que piso vives?

Camilo: Justo en el departamento de arriba.

Sara: ¡¿Arriba de Diego?! Se podría decir que estás todo el tiempo arriba de Dieguito (ríe)

Camilo: (incomodo) ¡Eh…, visto de esa manera…, si, pero solo de departamento.

Sara: (ríe) ¡Si pues, así que eres el presidente de la junta de vecinos del edificio…, huy qué excitante!

Camilo: (orgulloso) ¡Así es, imagina Sara, querida, tú junto a mi serías la primera dama del edificio.

Sara: ¡Por favor no sigas!

Camilo: ¿Te gustaría recorrer mi nación, la azotea permite una vista impresionante de la ciudad, puedes sentir el smog en su grado más puro.

Sara: Eres todo un galán.

Camilo: Por ti Sara, detengo todos los ascensores, solo para que no te agites…

Sara: ¡Deja qué me agite nomá’, mira que hace mucho que no lo hago.

Camilo: ¿Qué esperamos entonces, así dejamos a Diego con su polola…¿Estás segura que él, esta pololeando con esa niña?

Sara: ¡Si…, es raro cierto?

Camilo: Mucho…, en fin, vamos a la azotea (muy pícaro), haber si nos agitamos un poco.

Sara: ¡Me parece una excelente idea!

Salen los dos, entra Willy que los estaba escuchando, camina hasta la puerta.

Willy: ¡Huy, la tía salió buena para la agitación, podría aprender Diego…

Carola y Diego entran en escena.

Diego: ¿Aprender qué?

Willy: (se asusta) ¡Hay, avisa bonito, qué mi corazón está sensible!

Carola: ¿Y la señora Sara y don Camilo?

Willy: (muy campante) Fueron a la azotea a agitarse.

Carola y Diego: ¡Qué!

Willy: ¡Bueno eso le oí decir!

Diego: ¡No puede ser, mi mamá en la azotea con Camilo, quizá qué le va decir, que se la llevó allá, para que no pueda evitarlo…

Willy: ¡Cálmate, dramático, ya te dije, ellos solo quieren agitarse!

Diego se tira sobre él, Carola lo detiene.

Carola: ¡Cálmate Diego, si solo están pololeando, deben estar coqueteándose…, además yo creo que tu mamá no se tragó el cuento de nuestro pololeo…, la verdad insisto en que tu mamá te cacha…

Diego: ¡Calla mujer…, pero cómo mi mamá podría saber lo mío (todo lo hace muy dramático y amanerado mientras los otros dos lo miran con ironía)

Willy: (irónico) ¡Realmente, cómo la tía podría siquiera sospechar de ti?..., mírate, parece loca histérica…, sabes debieras buscarte un novio, pa’que se te quite el carácter de solterona…, ponte tú!

Diego: ¡Ya sé, cuando mi mamá vuelva, nosotros (indica a Carola), nos besamos!

Carola: ¡Estas loco, mira una cosa es que parezcamos frente a tu mamá, que somos pololos, pero besarnos! Eso no estaba en al acuerdo, además mi pololo se pondría furioso.

Diego: ¡Pero, para qué le vas a contar a tu pololo!

Carola: Lo siento, pero nosotros nos contamos todo…

Diego: Si solo sería un piquito, un beso chiquito, solo para que mi mamá crea.

Willy mira y hace cara de asco.

Carola: (dudosa) ¿Solo uno?

Diego: (ansioso) ¡Si!

Carola: ¿Chiquito?

Diego: ¡Si!

Carola: ¿Sin lengua?

Willy: ¡Paren, paren, sucios, voy a vomitar, este mundo esta loco, qué horror, qué pasa en este mundo, todo debería ser cómo antes (hace los gestos), hombres, bien hombres, mujer, bien mujer, marica, bien…

Diego: Ahora, quién es el dramático, ponte tú?

Carola: ¡Esta bien, pero ensayemos el beso, mira que es tan extraño besar a un amigo.

Diego: (nervioso) ¡Ok, un beso, besito chiquito, hay qué nervios!

Carola: ¡Concéntrate, piensa en que soy alguien que te gusta…

Willy: ¡Si, piensa en algún artista, como…, ah ya sé, Brat Pitt.

Diego: ¡No, no es mi tipo, muy rubio!

Willy: ¡Antonio Banderas!

Diego: (dudoso) mm…, no sé.

Carola: ¡Ya elige luego el mino, qué me estoy arrepintiendo!

Willy: ¡Ya sé, Rolando Valenzuela, es muy regio él…

Diego: ¡Es muy Viejo!

Willy: ¿Y vo’?

Diego: ¡Esta bien, ya elegí!

Willy: ¿A quién?

Diego: Al guapo de Pato Torres.

Willy: ¡scht!

Carola: ¿Estás seguro, es qué es tan chico?

Diego: No importa, es mi vida ok? (se besan)

Willy: ¡Qué asco! (hace gesto de querer vomitar)

Diego: ¡Ya!, no fue tan difícil.

Carola: ¡Cierto!, no fue nada

Willy: ¿Por qué crees, que sigue solo? (ríen ambos)

Entran en escena Camilo y Sara.

Sara: ¡Increíble la vista de la ciudad, desde la azotea, aunque había mucho viento!

Camilo: ¡Pero, ¿Quién la protegía del inclemente viento Sarita?

Sara: Tú, Camilin…, oye Dieguito, hablamos tanto allá arriba…

Diego toma a Carola y la besa mientras su mamá le habla.

Sara: ¡Huy…, tanta pasión, me dieron ganas de tejer (se ríen todos menos los besadores)

Diego: ¿Qué quieres decir madre? (dramático)

Sara: Nada, solo que e visto besos más apasionados en el cartoon Network (le habla a

Carola) ¿Estas segura mijita de pololear con mi hijo?

Carola: (dudosa) ¡Eh…

Diego: ¡Por supuesto que está segura, cierto mi amor?

Carola: (nerviosa) Si, mi vida.

Sara: ¡En fin, cosa de ustedes. Camilo vamos a mi habitación!

Camilo: ¡Pero no faltaba más!

Diego: ¡Mamá, no se ve bien que vayas al dormitorio con un hombre, que recién conoces!

Sara: ¡Hay, pero si con Camilo nos conocemos hace varias semanas por el chat, cierto?

Camilo: ¡Claro, esas noches heladas, eran otra cosa con nuestras charlas (ríen maliciosamente)

Diego: ¡Pero, ahora es distinto, ahora están en directo, face to face, se pueden oler, tocar…

Sara: ¡No sigas, me siento un tanto agitada!

Diego: ¡Mamá!

Willy: ¡Dele nomá’tía!

Diego: ¡Claro, ahora tú avívale la cueca!

Camilo: Dieguito, relájate, tu mamá ya es grandecita, yo también, no te preocupes, debieras ser más open mind, tú más que nadie (le habla bajito), vamos Sarita?!

Sara: ¡No me digas Sarita, solo Sara! (lo dice bien hot y se van al dormitorio)

Diego: ¡Vieron, vieron, me amenazó, fue un chantaje!

Carola: Tranquilo, son cosas tuyas, de seguro no lo hizo con esa intención.

Suena el timbre.

Diego: ¡¿Y ahora qué?! (abre la puerta, está un chico de unos 30 años aprox, se alarma y cierra la puerta)

Carola: ¿Quién era?

Diego: (muy nervioso, no le sale la voz) ¡A…, es A…

Willy: ¿Quién era?

Diego: ¡Es, A…, A…lex (lo dice bajito)

Carola: ¿Quién?

Diego: (más recuperado) Es Alex…, mi cita!

Willy: ¡Qué…, huy yo abro! (corre a abrir la puerta) ¡Hola, Alex?!
Alex: (desconcertado) Si…

Willy: (lo besa en ambas mejillas y lo hace pasar) Así que tú, eres el novio de Dieguito, y qué le viste así por ser?

Alex: (no sabe que decir) ¡Eh…

Carola: ¡No seas pesado, pasa Alex (con la mirada busca a Diego), ¿Y Diego?, ¡Diego!

Diego: (aparece desde la cocina, muy tímido) ¡Hola…¿Cómo estás? (le da la mano)

Alex: (se acerca y le da un beso en la cara) ¡Bien, ocurre algo?

Diego: ¡No…, no todo esta bien, súper!

Alex: Es que te noto raro.

Willy: ¡Huy, desde chiquitito (lo mira y le toca la cabeza), bueno cuando era más chico aun (ríe)

Entran Camilo y Sara.

Sara: (se queda mirando a Alex) ¡Hola, ya Dieguito preséntame, es otro amiguito tuyo?

Camilo: ¡Si porque a este no lo ubico!

Diego: ¡Eh…, mamita te presento a…

Carola: ¡Alex, mi hermanito (abraza a Alex)

Sara: ¡Mucho gusto mijito, soy la mamá de tu cuñado!

Alex: ¡¿De quién?!

Carola: (nerviosa) ¡De Diego po’hermanito, mi pololo!

Alex: ¡¿Tu pololo?! (molesto)

Carola: (le cierra un ojo y lo aleja del living hablándole bajito) ¡Sígueme el juego por favor!

Alex: (no entiende, esta desconcertado y molesto) ¿Diego es tu pololo? ¡Él me dijo que era soltero y gay y resulta qué se gasta parejo!

Carola: ¡Oye, no digas eso (sonríe a los demás), mi hermanito y yo vamos a la cocina a preparar café (lo saca a empujones)

Diego: (nervioso, ríe) ¡Qué loco este Alex…

Sara: (extrañada) Parece que tu cuñado no le gustó saber que era tu cuñado…

Diego: Si, es que es muy celoso de su hermana…

Sara: Más parecía pololo despechado.

Willy: ¡¿Cierto tía?!, a mi también me pareció…

Diego: Gracias amigo (lo mira enojado)

Willy: ¡Ups, sorry!

Camilo: Oye Diego, parece que tu cuñado es como Willito…

Willy: ¡Hay, qué sapo el viejo! (lo dice al público)

Sara: Bueno, ahora voy al apartamento de Camilo, nos vamos a tomar unos traguitos.

Camilo: ¡Si, tengo un oporto exquisito, vamos querida.

Salen ambos y entran Carola con Alex.

Carola: ¿Se fueron?

Willy: (suspira romántico) ¡Si…, es tan romántico!

Carola: ¡Ya le explique a Alex!

Alex: Si ya sé lo que ocurre, lo siento Diego, pero es que me pilló de sorpresa…

Diego: No te preocupes, te pido disculpas yo, debería haberte llamado, pero todo a sido tan vertiginoso.

Alex: (se acerca a él) ¿Pero, por qué no le cuentas a tu mamá, yo creo que ella lo entenderá, quizá ella ya lo sabe…

Diego: ¡Estas loco, la mataría del dolor, ella jamás se imaginaría que su hijo, su hijito, es…

Alex: ¡Qué dramático, seguro qué eres sicólogo, podrías ser actor!

Willy: ¡¿Cierto?!

Carola: ¡Ya bueno, terminemos luego esto, tengo que juntarme con mi novio…

Diego: ¡Pero te dije qué cancelaras tu cita, si solo es por hoy, mi mamá de seguro se va mañana!

Carola: Lo siento, no puedo decirle que no a mi mono (suspira)

Alex: ¿Y nosotros Diego, qué pasa con nosotros?

Diego: ¡Alex, guagua, ayúdame y nos juntamos mañana, te parece?

Alex: Esta bien (no muy convencido)

Willy: ¡Oye Alex, terminamos esto y nos vamos a bailar, te tinca?

Alex: No es mala idea…

Diego: ¡Pero, pero…, mejor te vas a tu casa, te acuestas y mañana te llamo y salimos a dar una vuelta por el parque, nos tomamos un helado (Diego sale adelante, todos lo quedan mirando), luego te compro un globo, no mejor una rosa, después un café… (todos se ríen)

Carola: ¡Bien fome el panorama, y en qué momento van al motel?

Diego: ¡Lo que pasa es que ustedes no saben nada del amor, el romanticismo…

Alex: (bien coqueto) A mi me gusta el romanticismo.

Willy: ¡Huy, otra pareja qué se quiere agitar!

Suena el Timbre.

Willy: Debe ser la tía, se le quedaron las llaves seguro…(abre la puerta, hay un hombre alto y fornido)

Carola: ¡Jaime!

Willy, Diego y Alex ¡¿Jaime?!

Carola: ¡Mi novio!

Willy: ¡El mono!

Jaime: (enérgico) Carito, te vengo a buscar!

Carola: (nerviosa) ¡Pero mi amor, si nos teníamos que juntar en una hora más!

Jaime: Lo sé, pero no aguantaba esperar tanto (la abraza), tú sabes cuánto te quiero, cuánto te adoro, cuánto…

Carola: (muy coqueta) ¡Ya, ya monito, yo también te adoro.

Diego: ¡Si, si, se adoran, se aman, pero tendrás que esperar hasta más tarde don Juan, ahora estamos ocupados, así que te tienes que ir (toma a Jaime por el brazo y lo conduce a la puerta)

Jaime: (sobreactuado) ¡No, no puedo estar sin ella, ni un minuto más!

Willy: (le habla a Carola) ¡Oye, tu mono es bien dramático también, mmm…, ojo!

Carola: (descolocada) ¡Hay, na’que ver, mi amor debes marcharte, es solo unos minutos, pronto estaremos juntos…

Alex: ¡Ba…, estos son Romeo y Julieta!

Diego: (impaciente) ¡Ya, ya, más tarde siguen con el segundo acto! (vuelve a tomar a
Jaime y lo conduce a la puerta, justo entran Sara y Camilo)

Sara: ¡Chiquillos! (se detiene y ve a Jaime), ¿Otro amiguito tuyo Diego?

Diego: ¡Este…, si, si mamá, te presento a Jaime, Jaime te presento a mi mamá!

Sara: Mucho gusto.

Jaime: Mucho gusto señora

Sara: Él, es Camilo, mi novio.

Jaime: Mucho gusto caballero, yo soy novio de…

Diego: (desesperado lo interrumpe) ¡De Willy!

Carola: ¡Qué!

Alex: ¿Cuándo?

Willy: ¡¿En serio?!, ¡Ups, ya po’! (se acerca y abraza a Jaime)

Jaime: (nervioso, no puede hablar) ¡Este…, yo…

Carola: (molesta) ¡Habla!

Diego: (la detiene) No es necesario, deja a los tortolitos (le habla entre dientes), es solo por un rato.

Sara: (muy entusiasmada) ¡Esto es maravilloso, qué moderno, se ven tan lindos juntos, te lo tenías calladito Willy…, y bien guapo tu novio!

Willy: Tía, usted sabe, yo soy muy reservado.

Sara: ¡Hay si lo sé lindo, ahora hay que celebrar, Willito con su novio, Dieguito con su novia (pone cara de extrañeza), y Camilo y yo, solo falta Alex, te vamos a tener que buscar pareja (ríe)

Alex: (molesto) No es mala idea, ya que estoy muy solo.

Diego: ¡Pero, tú…, ya sales con alguien, no es verdad?

Alex: Si, pero no tiene mucho tiempo para mi, de hecho nunca hemos tenido una cita.

Sara: ¡¿En serio mijito?! Entonces búscate a alguien que te valore…, ya se, te vamos a buscar pareja (entusiasmada), eso si aclárame una cosa, estoy casi segura, pero uno de repente se equivoca (mira a Diego), eh…, a ti te gustan los chicos cierto?

Alex: ¡Eh…, si un poquito!

Willy: ¿Un poquito? ¡Te gustan todo el rato!

Camilo: Sara, querida cómo lo hacemos, para buscarle pareja a Alex?

Sara: ¡Fácil, por Internet!

Camilo: ¡San chat!, vamos entonces, pero a mi departamento, así estaremos solitos (ríe pícaro y salen los dos)

Jaime: (molesto) ¿Qué significa esto? (abraza a Carola con miedo) Mi amor ahora soy gay, cómo le explico a mi mamá?

Carola: ¡No seas ridículo, si solo es una farsa, para engañar a la mamá de Diego!

Jaime: ¿Por qué?

Carola: Lo que pasa es que no quiere que su mamá sepa que es gay.

Jaime: ¡Claro, para eso tenemos que ser gay todos, menos él. ¿Y tú te haces pasar por su novia?

Carola: Es solo un favor que le hago…

Jaime: ¿Y por qué?

Diego: ¡Por qué somos amigos!

Jaime: ¡Ah…, yo también tengo amigos y no les pido que se hagan pasar por novios…

Willy: ¡Yo no tengo problemas! (le toma el brazo)

Diego: ¡Bueno ya, te pido disculpas, pero es solo por un rato más, por favor!

Jaime: No sé, por ahora quiero estar con mi novia.

Carola: ¡Si, mi amorcito, ven vamos a la cocina, ahí vamos a estar solitos (salen los dos)

Alex: ¡Yo me voy!

Diego: ¡No, por favor, no te vayas!

Alex: No tengo nada que hacer aquí, menos con un sicólogo con traumas. ¡No mejor dicho, con trancas!
Diego: ¡¿Trancas yo?! ¿De qué hablas?, ¡Esto es solo, para qué mi mamá no se entere, imagínate cómo sufriría, no puedo darle esa pena!

Willy: ¿Cuál pena? ¡La tía es lo más pro que hay, y estoy seguro que te tiene bien cachao!

Alex: ¡Pienso lo mismo, es más no se traga tu supuesto pololeo con la Carola!

Entran corriendo Jaime y Carola.

Jaime: ¡Nos vamos, apúrate Carola!

Carola: ¡Ya voy mi amor!

Diego: ¿A dónde van?

Jaime: ¡Nos vamos!

Diego: ¿¡Pero, por qué!?

Carola: ¡Es qué el mono se enojó y no te imaginas cómo se pone cuándo se molesta!

Willy: ¡Huy, se enojó mi novio!

Jaime: (molesto y tartamudo) ¡No, no soy tu, tu novio!

Carola: ¡Eso es verdad, él es mi novio!

Jaime: (mira de arriba abajo a Willy) ¡Ella es mi novia, tú…, tú no me gustas!

Willy: ¡Qué!, ¿Qué tiene ella, qué no tenga yo?

Carola y Jaime salen.

Diego: ¡No se vayan! (queda mirando a Willy) ¡Ves, ves todo es por tu culpa!

Willy: ¿Y yo qué hice ahora?

Diego: ¿No es cuchaste? ¡No eres su tipo, no le gustas! (sale detrás de ellos, Willy los mira perplejo y le habla a Alex)

Willy: ¡Qué raro él…, dice qué no le gusto…

Alex: (molesto) ¡Obvio, él no es gay, desubicado!

Willy: (molesto lo mira de arriba abajo) ¡Con razón Diego te cambió por la Carola (le hace un desprecio), eres un pesado! (sale en busca de los otros)

Alex sorprendido, lo queda mirando, se sienta en el sofá abatido, entra Sara.

Sara: ¡Diego (sorprendida no ve a nadie, solo a Alex, quien se puso de pie), lindo y Diego?

Alex: (nervioso) ¡Eh…, salieron a comprar…, pan para la once…

Sara: (más extrañada) ¿Y fueron todos?

Alex: ¡Si…, es que también van a comprar la margarina…

Sara: ¡Será! En todo caso qué bueno que estas (se sienta con él en el sofá), con Camilo ya te encontramos un pretendiente (ríe)

Alex: (sorprendido) ¡Qué! ¿Cómo?

Sara: (orgullosa) ¡Por Internet…, Camilo justo en el Chat conoce a un chico (ríe)

Alex: ¿Don Camilo? ¿Pero cómo conoce a un gay?

Sara: (extrañada) ¿Qué tiene de extraño, si por Internet lo qué más hay son gayses…

Alex: (la corrige) Gays.

Sara: ¡Eso…, gays, qué delicado!

Alex: Disculpe, no era mi intención molestarla.

Sara: ¿Ya, si no hay problemas, te estoy bromeando, bueno como te decía, Camilo está en contactando a este chico, para que venga a conocerte (emocionada) ¡Huy…, qué romántico, la cita es para hoy en todo caso…

Alex: (nervioso) ¿¡Hoy!? , sra Sara…

Sara: Dime solo Sara.

Alex: Esta bien, Sara, le agradezco, pero sabe mejor me voy, no es necesario que hagan esto…

Sara: ¡Para nada lindo, es lo mejor, imagina todos con pareja!

Alex: (triste y molesto) Si, todos con pareja.

Sara: (se percata) ¡Hum…, noto qué no estás muy contento! (se queda pensando) ¿Sabes, tengo algunas dudas? ¡A ver…, ¿Tú ya tienes novio? (Alex nervioso con la cabeza le dice no), ¡Ya…, entonces te gusta alguien? (nervioso le contesta con la cabeza si), ¡Ya…, entonces tienes pretendiente? (nervioso le hace gesto de no saber), ¡Ya…, y yo lo conozco? (nervioso le hace gesto de si), ¡Ya…, él es alto? (le hace gesto negativo), ¡Ya…, o sea él es bajito? (nervioso le hace gesto de si), ¡Ya…(se pone de pie, para seguir con el interrogatorio), algunas piezas no encajan (se detiene como si en su cabeza la historia se armara), ¡A ver lindo, necesito me contestes las siguientes preguntas (se acerca rápidamente a Alex), pero con la verdad! (le contesta que si), ¡Bien, partamos por el principio…, ¿Willy es gay? (Alex le contesta con gestos de que es obvio), ¡Ya…, ¿La Carola no es gay? (le contesta que no), ¡Ya…, ¿el pololo de Willy, es realmente su pololo? (le contesta que no), ¡Ya…, ¿Por tanto este niñito no es gay? (le contesta que no)¡Ya…(caminando hablando en voz alta), Willy la diva, Jaime el no novio, hum…, sigamos, ¿Carola es la novia de Diego? (lo dice para si, no lo pregunta, pero Alex le dice que no), ¿¡No!?, entonces por qué la presentó como su novia? (Alex se hace el desentendido), ¡Recuerda qué estás bajo juramento! (se acerca a él, intimidándolo), ¡A ver, continuemos, la Carola no es novia de Diego, cierto? (le contesta que si), ¡Ya…, entonces ella es novia de…, es novia de Jaime?(le contesta que si), ¡Bien, entonces Diego no tiene novia…, y tú estás sin novio, entonces Diego y Willy!!?

Alex se molesta, se pone de pie y le contesta, esta vez hablando.

Alex: ¡No, cómo se le ocurre, Diego no tiene mal gusto…, además (nervioso), ellos son amigos.

Sara: ¡Ahá…, entonces tú y Diego (ríe), cuando llamé a diego avisándole que venía, ¡Vieras lo emocionado que estaba porque venía…, este bueno, cómo te decía, cuando lo llamé, él me dijo que tenía una cita, o sea tú (vuelve a reír emocionada), pero no entiendo por qué me mintió.

Alex: Temía que usted, lo tomara mal, de hecho él piensa que usted moriría de dolor…

Sara: ¡Qué dramática la loca!

Alex: ¡Ups!

Sara: (arrepentida) ¡Hay…, cree que porque una tiene algunos años, es una güeo…

Alex: ¡Sara!

Sara: Esta bien, no he dicho nada. (comienza a hablar de Diego) Pero ya vas a ver, ya que cree, que soy una vieja retrograda…

Alex: ¿Qué va a hacer?

Sara: (picara) Nada, seguiremos con la mentira, tengo un plan, ven conmigo (se lo lleva a la pieza)

Entran en escena Diego, Carola y Jaime.

Diego: ¡Ya chicos, todo ya está aclarado, es solo por una hora más, les doy las gracias, todo es por mi mamá!

Carola: Eso espero, mira que mi mono está inquieto.

Jaime: (nervioso) ¡Si, si, pero que Willy no se me acerque!

Diego: (calmándolo) No te preocupes, lo mantendré a una prudente distancia.

Entra Willy.

Willy: ¡Mi novio, dónde está mi querido nuevo novio mono?

Jaime: (aterrado se pone detrás de Carola) ¡Ahí llegó!

Willy: ¿Qué pasó?

Diego: ¡Nada, nada, solo qué ahora existen algunas condiciones...

Willy: ¿Cuáles?

Diego: (suspira) Mira, tú sigues siendo novio de Jaime, pero no te puedes acercar a él, o sea no puedes tocarlo…

Carola: ¡Exacto, ya qué es mi novio!

Willy: (irónico) ¡A ver bonita, sé que él, es tu novio, pero yo soy un profesional, mi única intención es darle credibilidad a nuestra relación con el monito…

Carola: ¡Mi monito!

Willy: ¡Eso, pero si el mono…, no quiere ser profesional!

Carola: ¡No, él es muy profesional, para que lo sepas, de hecho él, va a estar muy junto a ti, para que la señora Sara no dude (empuja a Jaime a los brazos de Willy)

Jaime: (hace puchero) ¡Pero monita!

Diego: ¡Qué bien, así será todo muy creíble!

Carola: (lo abraza) ¡Cierto, tu mamá se va a ir pensando, que nos vamos a casar y tener muchos hijos!

Diego: ¡Estupendo, seremos la pareja perfecta, el futuro matrimonio!

Entra Camilo.

Camilo: (sorprendido por lo escuchado) ¿¡Matrimonio!?

Diego: (sorprendido también) ¡Eh…, si estamos con la Carola, conversando sobre nuestro matrimonio, pe, pero a futuro!

Camilo: (extrañado) ¿Están seguros? ¿Carolita estás segura?

Diego: (molesto) ¡Bueno, por qué tanta pregunta, algún problema?

Camilo: ¡No, ninguno! (cambiando de tema) ¿Tu mamá, la Sarita, dónde está?

Diego: ¡¿No estaba con usted en su departamento?!

Camilo: Es que ella se vino para acá, hace rato…

Diego: ¡Cómo!

Camilo: ¡Si, yo me quedé buscándole un pretendiente a Alex?

Diego y Willy: ¿¡Qué!?

Camilo: ¡Si, y se lo encontré, de hecho viene en camino, si es muy inteligente y guapo, así que yo creo, que cuando se vean de seguro terminan de novios, así todos terminamos emparejados!

Diego: (perplejo y nervioso) ¡Pe, pero si él tiene novio!

Entran Alex y Sara.

Alex: ¿Quién te dijo eso? ¡Yo no tengo novio!

Diego: (triste) Pe…, pe…

Sara: ¡Hay, qué emoción! (abraza a Alex), ¡Ves lindo, ya no estarás solo, tendrás a alguien inteligente y valiente (mira a Diego), que se la juegue por ti!

Diego: (molesto) ¡Él no está solo!

Sara: (curiosa) ¿A qué te refieres Dieguito?

Diego: (nervioso no sabe que decir) ¡Eh…

Willy: ¡Si po’, él no está solo, está con nosotros, contigo (empieza a indicar a todos), contigo, contigo también (abraza a Jaime) y con nosotros, cierto mi amor?

Jaime: (nervioso abraza a Willy) ¡Si…, si mi monito!

Carola: (sorprendida y molesta) ¡¿Monito?!

Diego: (la interrumpe y abraza) ¡Si mi amorcito, no te acuerdas, que ellos por cariño se tratan de monitos, tierno, no?

Carola: (molesta) ¡Si, súper tierno!

Sara: ¡Tanto amor me emociona, oye (le habla a Willy y Jaime), ustedes ya que se quieren tanto, aun no los veo darse un besito.

Carola: (sorprendida) ¿Un besito?

Sara: ¡Si pues, un besito de amor!
Jaime: (Nervioso) ¡Es qué, no lo hacemos por, por respeto, puede don Camilo sentirse incomodo!

Camilo: ¡No, qué va, si hasta en las teleseries se dan besos, además el Willy besuquea a todos en el edificio!

Willy: (avergonzado) ¡Hay don Camilo, por favor…

Jaime: (molesto) ¿Es verdad eso monito?

Willy: (nervioso) ¡Eh, eh…, pero solo son besitos de amistad, tú sabes que soy tan cariñoso!

Jaime: ¡Cuidadito, no me gustan esas cosas mono!

Willy: (triste) ¿Me dijiste mono?

Carola: (enojada) ¿Le dijiste mono?

Jaime: (se acerca a Carola y le hala al oído) Es solo para dar credibilidad, soy un profesional.

Sara: ¿Bueno y besito cuándo?

Diego: (interrumpe justo a tiempo) ¡Ya mamá, déjelos, que se ponen nervioso!

Sara: ¡Hay, qué latero, bueno lo importante es que ahora Alex, va a tener una cita, va a conocer a su futuro ex, qué gracioso!

Alex: (entusiasmado) ¡Si, y a qué hora llega mi pretendiente?

Camilo: (mira su reloj) Debiera estar por llegar

Willy: (emocionado) ¡Huy, qué envidia, Alex una cita a ciegas, cuente don Camilo, cómo se llama, qué hace?

Camilo: Se llama Fernando y es psicólogo.

Sara: ¡Igual qué tú, Dieguito!

Diego: ¿Fernando?

Carola: ¿Lo conoces mi amor?

Diego: (descolocado) ¡Si, si es un colega!

Willy: ¡Pucha qué hay sicólogos gays!

Jaime: (mirando a Diego) ¡Si, hartos, uf!

Camilo: ¡Mejor, va a ser más fácil todo!

Alex: (nervioso) ¡Si, qué chori, no?

Sara: (entusiasmada) ¡Ya Diego, arreglemos todo, para la cita de Alex y así celebramos todos!

Willy: ¡Si…, qué entrete, no te parece monito?

Jaime: (con duda) ¡Eh…, si por supuesto, súper!

Carola: (molesta toma a Diego del brazo) ¡Oye, esto no puede seguir, tu mamá le consigue novio a Alex, por tanto te quedas solo y Willy se esta tomando en serio que

Jaime es su mono, perdón su novio y capaz que lo convenza y me quedo sola también!

Diego: (nervioso) ¡Si no es para tanto!

Carola: ¡Por favor, tú y yo sabemos cómo es Willy, además en una de esas mi mono, que ahora es el mono de él, se pone heterocurioso!?

Diego: (desesperado) ¿Pero, qué hago?

Carola: ¡Di la verdad!

Sara: (los escucha) ¿Qué verdad?

Diego: ¡Eh…, nada mamita…

Carola: ¿Cómo qué nada…, habla!

Sara: (expectante) ¿Hablar de qué nuerita querida?

Willy se percata que van a decir la verdad y no le agrada la idea, se quedaría solo otra vez.

Willy: ¡Nada tía, debe ser los planes de matrimonio (se acerca a Diego y Carola), ¡No quiero quedar sin novio tan luego!

Carola: ¡Qué! ¡Ahora esto se acaba!

Diego: (nervioso), ¡No espera, mi pobre madre va a sufrir un soponcio con la noticia, no debemos decirlo…

Sara y Camilo: (insistentes) ¿Decir qué?

Alex: ¡Ya po’qué tienen qué decir?

Carola: (molesta) ¡Es qué todo esto, nuestro noviazgo…

Willy: (interrumpe) ¡A sido maravilloso, están súper enamorados!

Diego: ¡Si, eso…

Carola: ¡Pero…

Camilo: ¿Algún pero?

Sara: ¿Ocurre algo?

Jaime: ¿Qué acontece en vuestras vidas?

Alex: ¡Hablen!

Carola: (suspira) Sra. Sara…

Sara: (la corrige) Solo Sara.

Carola: Eso, Sara, todo esto es…

Diego: (dramático) ¡Ten piedad, le va a dar un ataque…

Sara: ¿Ataque?

Camilo: ¿A quién?

Jaime: ¿Existe en esta sala un enfermo?

Willy: (no entiende) ¡Yo estoy sanito!

Carola: ¡No! Digo que todo lo ocurrido aquí…

Sara: ¿Qué ocurrió?

Camilo: ¿Ocurrió algo?

Jaime: ¿Aconteció una novedad?

Willy: ¡Yo no acontecí nada!

Diego: (abatido) ¡Ahora va a acontecer!

Sara: ¿Va a ocurrir algo?

Camilo: ¿Ahora?

Jaime:¡Qué apasionante!

Willy: ¡Yo soy bien apasionado!

Alex: ¡Ya dejen hablar a la Carola!

Carola: ¡Gracias, solo quiero decir Sara, que entre Willy y Jaime, no existe nada (todos sorprendidos)

Sara: ¿Qué quieres decir con nada?

Willy: ¡Ya me quedé sin novio otra vez!

Carola: Lo que escuchó, Willy y Jaime no son novios.

Sara: O sea, están mintiendo?

Camilo: ¿Es una farsa?

Jaime: ¿No es real?

Willy: ¡Yo soy de verdad!

Alex: ¡Ya paren, esto es una locura!

Diego: (resignado y muy dramático) ¡Esta bien, es hora de la verdad, madre adorada,
madre amada, tú qué me criaste, tú…

Todos: ¡Ya para dramático!

Diego: ¡Perdón, todo esto a sido invención mía, Jaime es novio de Carola…

Sara: (sorprendida) ¡Jaime eres bisexual!

Jaime: ¡No!

Diego: Madre aun no e terminado, Carola es solo mi amiga y Jaime no es gay…, y

Willy es…

Sara: (alegre) ¡Tu novio! ¡Qué emoción!

Diego y Willy: ¡No! (hacen gesto de asco)

Willy: Solo amigos tía, no me gustan los enanos.

Diego: ¡Cállate loca!, somos solo amigos

Sara: (picara) ¿Y Alex?

Willy: ¡Ese es el pinche…, ups parece qué metí las patas!

Diego: ¡No, esta bien, debo sincerarme con mi pobre y anciana madre…
Sara: ¡A ver, para un poco chiquitito, de pobre y anciana nada!!! Por otro lado ya sabia toda la verdad.

Diego: ¡¿Lo sabías?!

Sara: ¡Por favor, eres mi hijo, desde chiquito te notaba distinto!

Willy: ¡No creció mucho…, pero cuente, cuente!

Sara: ¡Si cuando en el colegio, todos los compañeritos jugaban a la pelota, tú dale con las tacitas con tus compañeras!

Diego: ¡Eso no significa nada mamá!

Willy: ¡Con razón te gusta tanto organizar onces!

Carola: ¡Si po’si hasta busca que las tazas hagan juego con el mantel y las servilletas!

Jaime: ¡A mi también me gustan las tacitas!

Carola: ¿Qué?

Jaime: ¡Si po’, los tazones con la insignia de la selección!

Carola suspira y lo abraza y corre a Willy.

Sara: ¡Bueno pongamos orden entonces, ya Carola con Jaime (los pone a un costado), bien Dieguito con Alex (los junta y los pone al otro costado), Camilo conmigo (lo toma por el brazo y lo acerca hacia ella), y Willito… (lo mira con pena), bueno Willito, la alegría del hogar (suena el timbre)

Camilo: ¡Debe ser Fernando!

Willy: ¡Hay, yo voy…, ahí viene mi novio

Abre la puerta y entra un hombre, Willy se tira a sus brazos.

Alex: ¿Y cómo estás?

Diego: Bien, imagina todos juntos, mi mamá tiene novia y yo?

Alex: También.





FIN

viernes, 3 de diciembre de 2010

Bigotes

Me miró suavecito y con la mano me saludó, mientras sonreía con timidez.
Lo llamé, se acercó, lo besé en la boca, se estremeció, me miraba mientras nos besabamos, luego cerró los ojos y me abrazó.
No me había afeitado y él, se dejó unos mostachos, pica la cara.

Eyes War

Se miraban a los ojos. Ojos grandes y ojos chinos, sonreían, no pueden estar serios.
Estaban frente a frente, se les inflaban las narices de la tentación, no pestañeaban, fijo mirandose.
Los ojos grandes estan brillando, se estan llenando de lágrimas por el esfuerzo, los ojos chinos estan igual, pero se nota menos, se vuelven a reír...
Ojos chinos se fija en las pestañas de ojos grandes.
Ojos grandes se fija en los labios de ojos chinos, quiere morderlos y se lo dice.
Este ríe, ambos ríen y termina el juego...

-¡Haces trampa!- le indica ojos chinos.
-¡Solo quiero morderte los labios!- le dice ojos grandes.

Se ríen, se abrazan y...obvio, se besan!

NIÑOS

Estaba de pie junto al árbol, miraba el suelo.
Movia los pies arrastrandolos por el pasto verde.
Las manos a los lados.
Pasaba la gente, pero no los miraba, escuchaba música desde su móvil, cantaba bajito, estaba triste y no sabía bien el por qué. Le picó la nariz y se la rascó, sintió el olor del pasto mojado, sus ojos se abrieron aun más, dejó de cantar, miró alrededor, la música se acabó, todo estaba en silencio, ya no había gente, se apoyó en el árbol y volvió a mirar el suelo, cerró los ojos, tenía miedo, estaba solo...
Me acerqué y le dije hola.
Me miró, luego sonrió, tomo mi mano y nos fuimos caminando por el parque.